Acabó un invierno cargado de gastronomía. En estos meses que nos separan entre revista y revista han pasado muchas cosas. Muchos vinos catados. Muchos platos nuevos probados. Muchos eventos gastronómicos celebrados que trabajan en el proyecto común de promocionar la gastronomía regional. Todos y cada uno de estos pequeños actos en favor de nuestros productos suman en esta carrera de fondo, que es posicionar a Murcia como uno de los destinos gastronómicos más deseados del panorama nacional. Lo tenemos todo. Tenemos el producto, tenemos la tradición, tenemos el mar y la montaña, tenemos los profesionales y tenemos a la gente acogedora de nuestra región. Estamos trabajando en el camino correcto, pero aún nos falta muchos kilómetros que recorrer. Ya hemos hecho el ejercicio de mirar hacia dentro con la intención de saber cuáles son nuestros pilares. Nuestras raíces. Y, también, sabemos cuáles son nuestros miedos. Nuestros demonios. Estamos trabajando como nunca para que nuestra oferta gastronómica sea la más deseada, y en eso no hay duda, el que prueba, repite. Repite y lo cuenta. Quizá esa sea la tecla que debemos de tocar. Y debemos profesionalizar la sala, trabajar más en esto. Debemos ser honestos con el producto y respetarlo. Debemos creérnoslo más, llenarnos los bolsillos de orgullo y salir a contarlo. Pero contarlo con las escopetas cargadas. Salir a echar toda la carne al asador. Salir a contarlo con el corazón, con el alma y con el puchero; y con la seguridad del que tiene un tesoro entre los dedos y está deseando compartirlo a todo el mundo, porque está en nuestro ADN. Ese tesoro no hay que crearlo, ya lo tenemos y se llama Murcia.
Joaquín Reyes Alcaina
Director y Editor de Revista Gastrónomo
Gerente Red de Sabores
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