El restaurante Estirpe abre las puertas a la gastronomía neotradicional, en Yecla.







El chef Juan Azorín y la sumiller Ana Sánchez estrenan su proyecto personal en Yecla: Estirpe, un restaurante gastronómico donde actualizan y ponen en valor la gastronomía yeclana

El restaurante abre mañana viernes, 22 de octubre y su oferta gastronómica está basada en una carta de platos neotradicionales yeclanos, ejecutados por el chef Juan Azorín, y la sala y la carta de vinos y cafés e infusiones, seleccionados por la sumiller Ana Sánchez



Estirpe es un restaurante nuevo donde se respira el respeto, la honestidad, la familia y que se basa en buscar el origen de las raíces gastronómicas de la zona de Yecla y el altiplano. Es un proyecto con las ideas claras, “se trata de una ilusión a la que le venimos dando vueltas juntos desde hace tiempo y donde hemos dado, por fin el paso, para mostrar quiénes somos”, comenta Ana Sánchez, sumiller de Estirpe. El restaurante, que abre hoy sus puertas en la Plaza de la Concordia, número 13 de Yecla, es el proyecto personal de la pareja formada por Juan Azorín y Ana Sánchez, chef y sumiller y jefa de sala respectivamente, donde dan la vuelta a sus raíces gastronómicas y recuperan la identidad gastronómica de Yecla. “Estirpe es el sueño que nos mantiene con los pies en la tierra”, añade el chef Juan Azorín.


¿Qué es un restaurante neotradicional?
“Estirpe es nuestra casa, donde transmitimos quién somos y de dónde venimos, le damos la vuelta a nuestras raíces gastronómicas”, expone el chef Juan Azorín.

Estirpe es un restaurante único en su especie, que huele a hogar y tiene una personalidad. Concretamente, los rasgos gastronómicos de sus dos alma máter: la sumiller Ana Sánchez y el chef Juan Azorín. Es un restaurante con historia, aunque acaba de abrir sus puertas, porque conservan sus raíces gastronómicas, las que han aprendido en casa, de su familia y de su experiencia juntos en reputados restaurantes gastronómicos de la zona como Maralba (2**) y Barahonda.


La carta de Estirpe
La gastronomía neotradicional de Estirpe se materializa en los platos y los vinos que han trabajado Juan y Ana durante meses. La carta se divide en nueve snacks, como el puerro a la llama con espuma de romesco y caviar de AOVE, croqueta de cordero con romero y leche de cabra y buñuelo de guiso de calamar estilo thai y emulsión de cilantro, por citar algunos; cinco platos para compartir, como las mollejas crujientes con crema de coliflor y almendra y dumpling de langostino y jengibre con sopa de miso y raíces; cuatro platos principales, como la costilla de res con barbacoa de whisky flambeada y kikos y la costilla de merluza, emulsión de rúcula e hinojo; y cinco postres, como licuado de pepino, apio, menta y helado de manzana, y pistacho y chocolate puro. Tienen un hueco especial los cinco platos de huerta y tierra, como la berenjena a la llama glaseada con teriyaki, pistacho y brotes, y Stracciatella, burrata con chocolate puro, sopa de maíz dulce, frambuesa y albahaca.

La carta de vinos tiene referencias de Yecla, pero cuenta con referencias de espumosos, generosos, dulces, blancos, rosados y tintos de diferentes tipos de uva que ha seleccionado Ana: glera, palomino, riesling, albariño, viognier, Malbec, Bobal, Mazuelo, Garnacha, y por supuesto: Monastrell. Muchos son de bodegas pequeñas, españolas en su mayoría, aunque con algunas referencias del mundo: Argentina, Italia, Alemania y Francia.





La familia Estirpe
El nombre de Estirpe lo eligieron los dos profesionales porque sus dos apellidos son originarios de Yecla, con mucho arraigo en la zona y porque es una palabra rompedora, que transmite fuerza. La pareja se muestran ilusionados y orgullosos con el restaurante y la carta que han creado para dar forma al concepto de gastronomía neotradicional en Estirpe, después de su trayectoria en restaurantes gastronómicos que son referencia en la zona.

Juan Azorín no se corta en manifestar su amor por las verduras y la gastronomía honesta, sin máscaras. Él mismo afirma que fue en Los Chispos (Yecla) donde más ha aprendido de cocina, aunque su carrera pasa por Inglaterra (Zerodegrees, en Bristol), y junto a Ana ha trabajado en Almansa (Maralba, con dos estrellas Michelin), Murcia y Yecla (Barahonda). Se define como observador y detallista. En Estirpe aporta su conocimiento y personalidad, para conseguir la cocina que siempre ha soñado: fiel y respetuosa al territorio yeclano. Por su parte, Ana Sánchez tiene las ideas claras pero se considera una soñadora, a partes iguales. Es una amante de los buenos modales y del respeto a su trabajo y a su familia, donde aplica su interés por transmitir la sencillez, para conseguir la experiencia gastronómica neotradicional de Estirpe.

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